En los últimos años, la prevalencia del Trastorno del Espectro Autista (TEA) se ha incrementado significativamente. Según un estudio de The Autism Community in Action, los diagnósticos han aumentado un 317% desde el año 2.000, afectando a 1 de cada 59 niños en el mundo.
Se calcula que hay más de 450.000 personas autistas en España, un número aún mayor si se considera el gran impacto que produce en el núcleo familiar de la persona, repercutiendo en cada uno de sus miembros.
Con el fin de sensibilizar sobre la condición, la Fundación Casaverde ha organizado este miércoles 24 de enero la III Jornada de Neurorrehabilitación Infantil, centrada en mostrar los principales avances en el diagnóstico y tratamiento del Trastorno del Espectro Autista (TEA), así como dar a conocer estrategias para el manejo del trastorno en la vida cotidiana y casos de éxito en la rehabilitación. El evento se ha celebrado en la Fundación Mediterráneo de Alicante y ha contado con el patrocinio de la Ortopedia SACH.
El presidente de la Fundación Casaverde, Alberto Giménez Artés, destacó que es necesario insistir tanto en “la mejora de los diagnósticos y detección precoz como en el área de la educación para su mejor adaptación en los centros educativos”. Puso énfasis en que “necesitamos mayores recursos materiales, humanos y económicos para apoyar a las familias con niños TEA y lograr su mejor desarrollo educativo y de su calidad de vida”.
Comentó también la implicación del Grupo Casaverde, ya que la institución trabaja “desde hace más de 30 años dando apoyo en sus líneas de actividad de mayores, neurorrehabilitación del daño cerebral y diversidad funcional”.
UN DIAGNÓSTICO PRECOZ Y UNA INTERVENCIÓN MULTIDISCIPLINAR
Gemma Sirvent, directora de la clínica Casaverde Alicante, abrió la jornada destacando “las dificultades de las personas autistas y sus familias para obtener recursos adaptados a sus necesidades”. Desde su experiencia como neuropsicóloga, comentó: “hemos apreciado en los últimos siete años que ha habido un aumento exponencial de los casos, llegando a tratar a casi 150 autistas en el centro”.
La primera mesa de diálogo ha presentado las novedades en cuanto a la prevalencia, diagnóstico y abordaje de este trastorno. Las investigaciones más recientes permiten avanzar en nuevos tratamientos médicos, terapias y tecnologías que mejoran la calidad de vida de los afectados y de sus familias.
En la primera ponencia, la neuropediatra Ángela Sempere y la genetista Isabel Ochando, han repasado los signos de alarma precoces en niños/as con TEA y las causas del aumento de los diagnósticos.
En cuanto a los avances en tratamientos, la neuropediatra Carmen Martínez, de la Clínica Casaverde Murcia, ha resaltado en su intervención que “el mayor avance en el tratamiento de personas con trastorno del espectro autista empieza por un diagnóstico precoz que de forma multidisciplinar evalúe sus capacidades y diseñe un plan de intervención terapéutica individualizado.”
También se ha puesto en valor la importancia de establecer dietas específicas para niños y niñas con TEA. “No hay dietas milagro ni suplementos nutricionales para curar el TEA, pero una alimentación concreta, por ejemplo, sin gluten o antiinflamatoria, mejora ciertos síntomas o comportamientos” ha explicado Minerva Linares, terapeuta ocupacional especializada en alimentación para personas autistas.
La segunda mesa ha girado en torno a las estrategias de manejo del TEA en la vida cotidiana con especial énfasis en el manejo emocional, los cuidados y la mejora de la comunicación con los pacientes.
Tayza Eltoro, terapeuta ocupacional de la UEO Elche, ha centrado su discurso en la estimulación sensorial a través de la alimentación, los colores y las texturas. En la línea del manejo emocional y la regulación conductual ha hablado Paula Álvarez, neuropsicóloga en la clínica Casaverde Alicante.
Por último, Melani Jaimez, logopeda de la clínica Casaverde Alicante, propuso los Sistemas Alternativos y Aumentativos de Comunicación (SAAC) como herramientas clave para comunicarse y conocer las necesidades del niño/a.
La jornada continuó con el testimonio de una familia que ha ampliado la visión sobre la convivencia con el autismo y los procesos de apoyo que se establecen en los diferentes ámbitos afectivos.
Al cierre de la sesión, el presidente de la Fundación Casaverde hizo hincapié en “la prevención, adquisición de hábitos saludables y promoción de la salud. Y adelantó que este año el Grupo Casaverde va a crear una Unidad de TEA específica que permitirá “ofrecer un diagnóstico y tratamiento de mayor calidad, junto con nuestra condición de centro acreditado por las Becas del Ministerio de Educación para la reeducación psicopedagógica y del lenguaje”.